Por fin ha llegado el fin de semana del encuentro. Días, meses de preparación de las 4 obras de este año. Nervios, expectativa, ilusión.. muchas emociones juntas que nos dejan muy buen sabor de boca, sobre todo a mi. Escuchar a casi todos/as tus alumnos/as tocar junto con muchos más flautistas de otras escuelas en conjunto es todo un placer. La verdad que hay muy pocas oportunidades de tocar con tantas flautas juntas y la sonoridad que se crea es absolutamente mágica. Ver disfrutar a alumnos/as, madres y padres llena tu trabajo de sentido. Verles salir emocionados/as del cuento musical o tocando con las flautas de pan que ellos se ha construido. Si todo esto concluye con un concierto de Ander Erburu, ex-alumno de la escuela, a quien he tenido la gran suerte de iniciar en este mundo de la flauta, es una satisfacción indescriptible. Emocionada al escucharle tocar lo casi intocable con una perfección y sentimiento inigualables, hace que todo tenga sentido.
Gracias a todos los que habéis hecho posible este encuentro.